Un nuevo tratamiento que le cambió la vida

Esta es la historia de Eda Saraç, de 14 años y de Bolu (Turquía), a quien pasar a la diálisis domiciliaria le dio nuevas energías para volver al colegio y tener amigos.

Eda Sarac padecio una nefritis cuando tan solo contaba un ano de edad. Esta patologia, que puede derivarse de una infeccion, de toxinas o, lo que resulta mas habitual, de una enfermedad autoinmune, provoca la inflamacion de los rinones y puede dar lugar a una disminucion de la funcion renal. A pesar del duro tratamiento, Eda empezo con la dialysis cuando tan solo tenia once anos. Por desgracia, recibir un rinon de sus padres estaba descartada como opcion: el tipo de nefritis que habia padecido podria volver a darse con el rinon de un familiar.

Tras dos anos de hemodialisis, Eda tuvo suerte y recibio un rinon de un donante fallecido. Sin embargo, la misma enfermedad ataco a su nuevo rinon y tuvo que volver a someterse a dialisis. Este hecho supuso un duro golpe para ella. Sin embargo, gracias a la dialisis domiciliaria, ha vuelto a hacerse con el control de su vida y el Nuevo tratamiento le da el impulso que necesita para seguir con sus estudios.

Diálisis Domiciliaria- La major opción para Eda

Antes de pasar a la dialisis domiciliaria, Eda se sentia frustrada por no poder ir al colegio dos dias a la semana por tener que acudir a las sesiones de tratamiento. Ademas, estaba experimentando sintomas que le impedian concentrarse bien en clase. A menudo, cuando el profesor le preguntaba, aunque si se sabia las respuestas, le costaba recordarlas.

Para la mayoria de adolescentes, tener una vida social activa constituye una parte muy importante para crecer, desarrollarse y hacerse adultos. Eda no era ninguna excepcion. Sin embargo, las sesiones regulares de dialysis le limitaban el tiempo que podia pasar con sus amigos.

Por eso, el ano pasado, Filiz Calisir, supervisora de enfermeria en el centro de dialisis al que acudia Eda, les hablo a los padres sobre una modalidad terapeutica: una dialisis gradual aunque con sesiones de mayor duracion pero que tambien se podia realizar en casa. Este tipo de dialisis podia ayudarle a eliminar algunos de los sintomas que presentaba, de manera que podria ir al colegio y mejorar el rendimiento escolar. Su madre se mostraba algo reacia al principio; Eda, en cambio, insistio en probarlo. Con 13 anos, su mayor deseo era sentirse mejor, sacar buenas notas en el Esta es la historia de Eda Saraç, de 14 años y de Bolu (Turquía), a quien pasar a la diálisis domiciliaria le dio nuevas energías para volver al colegio y tener amigos. colegio y asi poder convertirse en uno de esos tecnicos sanitarios de urgencias que ayudan a los pacientes.

Fue por ello por lo que Eda y su madre empezaron a practicar en el centro de dialisis. Todo el mundo se sorprendio al ver la habilidad con la que Eda se introducia las agujas en la vena. Tras un tiempo, Eda y su madre se dieron cuenta de que no resultaba tan duro como habian imaginado y que tambien daban un buen ejemplo a otros pacientes.

Ademas de aprender la manera de realizar la dialisis real, el tratamiento domiciliario requeria instalar un equipo de dialisis integral y un Sistema para el agua en la casa familiar de Eda. En muchos aspectos, Eda tiene suerte de vivir en Turquia. Su pais ayuda a los pacientes que quieren probar la dialisis domiciliaria, algo que no ocurre en todos los paises.

Persiguiendo sus sueños

Con un poco de practica, Eda aprendio a realizer la dialisis en casa, lo cual le permite ir a clases todos los dias. Cuando terminan las clases, Eda vuelve a casa y se somete a una sesion de entre 7 y 8 horas de dialisis con la ayuda de su madre. Como le habia explicado la enfermera Filiz, al limpiar la sangre lentamente durante un periodo prolongado, este nuevo tratamiento le ayuda a eliminar algunos de los efectos secundarios que habia estado experimentando.

Como estudiante aplicada que es, Eda aprovecha el tiempo de la dialisis para estudiar. Y gracias tambien a la dialysis domiciliaria, por fin ha retomado su vida social y se alegra de poder ver a sus amigos con frecuencia. Ahora tambien puede pasar mas tiempo con sus padres.

Ya ha pasado ano y medio desde que Eda empezo a someterse a hemodialisis en casa. Cuando le preguntan como le ha cambiado la vida, explica que «durante los primeros nueve meses, subi de peso: era tan delgadita antes; ahora me siento fisica y emocionalmente mejor.»

Si se le pregunta por otros cambios, suele anadir: «Ahora sigo todo lo que dice el professor y participo en clase. No soy distinta de ninguno de los demas companeros. Mis notas en matematicas eran malisimas pero he mejorado mucho y estoy segura de que pronto mejoraran aun mas.»